Por: Ángel Lockward
El jueves el país amaneció con la información suministrada la noche anterior de que el líder de la oposición y favorito para ganar las elecciones del 5 de julio, Luis Abinader y su esposa Raquel, dieron positivo al Covid 19, de inmediato se sucedieron las muestras de solidaridad de amigos y de opositores y, desde luego, sin que ninguno lo anunciara, se empezaron a mover las estrategias políticas.
No hay dudas de que después del aplazamiento – inconstitucional – de las elecciones fijadas por la carta Política para el 16 de mayo, esta – a 25 días de las elecciones – es la principal noticia política y, tampoco la hay de que representa un riesgo para la democracia.
En un mundo que tiene 7.3 millones de personas contagiadas, contadas y que acumula 413 mil fallecidas, esta información produce una preocupación democrática genuina en los 10.5 millones de dominicanos que puede generar adhesiones al candidato y alegrías escondidas en sus adversarios dependiendo del manejo táctico que se dé a la misma.
Sólo se han realizado unas escasas 100 pruebas que dieron un conteo de 21 mil infectados, de los cuales sólo fallecieron, lamentablemente, 550, por lo que cualquier persona sin patologías previas que siga el protocolo lo lógico es que se recupere: Yo – con más edad que Luis – lo padecí a finales de marzo y estaba negativo a mediados de abril. Según las estadísticas – poca gente saludable que siga el tratamiento- muere de Covid 19.
Empero independiente del efecto que la noticia tiene sobre la estrategia de los otros dos contendores, Gonzalo y Leonel, lo cierto es que Luis deberá seguir un protocolo de aislamiento que limitará sus movimientos y, su contacto con la gente, eso, por su propia salud, por la de los demás y sobre todo, para dar ejemplo: Su estrategia desde luego deberá variar.
Siendo una persona fuerte sin otras condiciones de salud deberá mantener el ritmo de trabajo, aunque sea virtualmente, que no es tan eficaz como la presencial, pero es la única opción, aprovechando la simpatía de la gente y dando ejemplo de entereza ante la adversidad; eso además permite a la ciudadanía dar seguimiento a su estado de salud, que es un tema de interés general: A fin de cuentas, en el país hay muchas personas que hemos sobrevivido al virus y hacemos vida normal.
Resulta obvio que descansará más en su compañera de fórmula, quien, si bien tiene mejor imagen que sus dos competidoras, tiene menos tigueraje político y por vía de consecuencia, no conviene sobre exponerla, el peso, sobre todo, recaerá sobre su equipo político nacional y local, pues ellos deben llevar el mensaje de sus políticas públicas en cada tema: Necesitará ampliar y mejorar su equipo de voceros.
La gente se pregunta sobre la obsesión del Gobierno con el Estado de Emergencia de casi 100 días en una 3era fase de desescalada, cuando todo puede enfrentarse con los poderes ordinarios del Ejecutivo, sobre todo con la emergencia sanitaria que puede disponer el Ministro de Salud, conforme a la Ley 41-04: La respuesta es que la Emergencia restringe los derechos políticos y el toque de queda impide a la Oposición realizar actividades de recaudación: Ahora, el aislamiento puede convertirse en una seria limitante financiera para Luis porque reduce su capacidad de recaudación, algo que solo el candidato puede hacer bien.
Esta circunstancia adversa no parece que pueda detener la Ola del Cambio que él representa, pero da esperanza al Gobierno de que haya segunda vuelta por la combinación de factores: Menos movilidad suya, eventual incremento por miedo de la abstención y el surgimiento de una ilusión electoral de Gonzalo. Incluso Leonel, podría recuperar algunos puntos perdidos durante su ausentismo presencial.
Los pueblos están compuestos de ciudadanos que expresan simpatías y, estas en la mayoría de los casos son expresiones subjetivas de sus sentimientos y emociones, en ese orden, la honestidad del candidato al informar su estado y su condición de víctima de la pandemia debido a los riesgos corridos por auxiliar a la población fácilmente terminan aumentando su caudal electoral, pues a fin de cuentas no fue bailando que se contagió, sino trabajando por la gente y, eso la población lo valora mucho.
Los caminos de Dios son insondables, de pronto las cadenas de oración abiertas desde la noche del miércoles por la salud de Luis, llegan más lejos que los slogans de campaña.