EE.UU.- El expresidente estadounidense George W. Bush se ha pronunciado sobre la situación de protestas que vive el país desde hace una semana a raíz de la muerte bajo custodia policial de George Floyd, apelando a escuchar a los afroamericanos y a «examinar nuestros trágicos fracasos».
En un comunicado, el antiguo mandatario ha expresado su malestar por la «brutal asfixia» de Floyd, que murió tras quedar inmovilizado en el suelo por la rodilla de un agente en su cuello y pese a que advirtió de que no podía respirar, y ha sostenido que «esta tragedia, en una larga serie de tragedias similares, plantea la cuestión largo tiempo debida: ¿Cómo ponemos fin al racismo sistemático en nuestra sociedad?».
Bush ha explicado que no había querido hablar hasta ahora «porque no es momento de dar lecciones» sino que «es momento de escuchar», «es momento de que Estados Unidos examine nuestros trágicos fracasos», entre los que ha citado el hecho de que «muchos afroamericanos, en especial los jóvenes, sean acosados y amenazados en su propio país».
En opinión del expresidente, lo que hace falta es «escuchar las voces de tantos que sufren y están de luto». «Aquellos que se disponen a silenciar esas voces no entienden el significado de Estados Unidos», ha subrayado, defendiendo que el «gran desafío» del país es «unir a personas de muy diferentes orígenes en una sola nación de justicia y oportunidad».
«La doctrina de la superioridad racial», ha prevenido, sigue siendo una amenaza para el país por lo que ha incidido en que «solo podemos ver la realidad de Estados Unidos viéndola a través de los ojos de los amenazados, los oprimidos y los desencantados».
Según Bush, «ahí es justo donde estamos ahora», pero ha dejado claro que la justicia que quieren los afroamericanos «solo llegará por medios pacíficos». «El saqueo no es liberación y la destrucción no es progreso», ha recalcado, si bien ha admitido que para que haya una paz duradera «hace falta una verdadera justicia equitativa».
«El estado de Derecho depende en último término de la justicia y legitimidad del sistema legal y conseguir la justicia para todos es la obligación de todos», ha defendido.
«Estoy convencido de que juntos, los estadounidenses elegirán el mejor camino», el de «la empatía, el compromiso compartido, la acción valiente y la paz arraigada en la justicia». En su comunicado, Bush no ha hecho mención en ningún momento a la gestión de la crisis que está haciendo el actual presidente, Donald Trump.