Santo Domingo. – El Grupo Canario, encargado de realizar las pruebas Verope a la Central Termoeléctrica Punta Catalina (CTPC), advirtió que la central podría colapsar si se ponen a operar sus dos unidades a 386 megavatios (MW) brutos.
Mediante un documento, con fecha del 22 de junio del 2020, el consultor Serafín Canario de la Rosa detalla “la verdad sobre lo ocurrido en el proceso de las pruebas” y reta al administrador de la central, Jaime Aristy Escuder, y al equipo técnico de la central a un debate público para demostrar quien dice la verdad.
“Recomendamos a Jaime Aristy que no cometan la locura de operar las unidades 1 y 2 en 386 MW brutos, ya que según sus declaraciones la empresa McHale & Associates determinó que la potencia máxima de las unidades es de 386 MW brutos cada una”, plantea Canario.
Agrega que, si se pone en práctica esa “irracional decisión”, operando a ese nivel de potencia la central colapsaría en menos de 15 días.
Reitera no pasó las pruebas
Canario reitera que la CTPC no pasó las pruebas Verope y que la capacidad real de las unidades es 356 MW brutos cada una. Alega que los ataques de Escuder se deben a que el consultor reflejó los resultados reales de las pruebas a pesar de que ellos querían que reflejara que las unidades tienen la capacidad de generar 376 MW brutos cada una.
Canario indica además que el 29 de mayo del 2020 el vicepresidente ejecutivo de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Rubén Jiménez Bichara, les comunicó la terminación unilateral del contrato.
Agrega que la CDEEE estaba dispuesta a pagarles completo, aunque solo le habían realizado las pruebas a la unidad 1, faltaba la 2, pero el grupo dice que no aceptó porque “no recibimos dinero de trabajos no realizados”.
Sobre este informe el administrador de la central dijo lo siguiente: Estamos preparando la respuesta que demuestra que la unidad 1 de Punta Catalina aprobó la prueba Verope.