Por: Dr. Ángel Lockward
Leonel ha propuesto un Gobierno de facto, antes de que hablara Danilo y, sin, al menos en público, la opinión de Luis; el hecho hace evidente que ante su debilidad de recaudación y los resultados del 15 de marzo ha decidido ganar tiempo, a costo de ponerse al margen de la historia.
Para posiciones públicas como esa siempre hay un “motivo público” que se vende a la gente para engañarla, esta vez es el coronavirus que, tiene aterrada a la población y de rodillas al mundo, empero, ¿hasta dónde es cierto? Faltan 45 días y las elecciones presidenciales – más sencillas – que las municipales, están montadas. ¿Cuál es la aglomeración en el proceso de votar? La cola del colegio electoral, que no es más larga que la que hoy tenemos en los supermercados, bancos y mercados públicos: Basta guardar la distancia social.
La posposición de las elecciones, excepto por la ilegal actuación de la JCE el pasado mes, es constitucionalmente inviable: Las Asambleas están convocadas por la Constitución en su artículo 209, para el tercer domingo de mayo, nadie tiene autoridad para cambiar eso: Leonel propone un acuerdo entre políticos para violar su Carta Magna.
La propuesta de aplazamiento es un sofisma, puesto que el Presidente, Vicepresidente y Congresistas terminan su mandato a las 10:00 del 16 de agosto y, no puede ser extendido: El truco es que asuma el Presidente de la Suprema, pero esa previsión es solo para cuándo Presidente y Vicepresidente, faltan en forma definitiva dentro de un mandato inconcluso y, como el Congreso Nacional, también termina, no hay quien designe al nuevo Presidente porque no hay periodo que finalizar: Seria un Gobierno de facto, conforme al artículo 73, como el triunvirato, que operaria sin Congreso Nacional, a menos que ilegalmente se pretenda prolongar el actual dominado por el PLD: Hay un precedente nefasto, Leonel mismo aumento de 4 a 6 años el periodo de los legisladores del 2010 al 2016.
El país viene de una situación de “casi” desobediencia civil durante el mes de febrero, la situación económica que dejará el coronavirus será terrible. Cuál es la gracia de intentar engañar a la ciudadanía con un Gobierno de facto a través del miedo al coronavirus para dar un año a los que perdieron el proceso pasado: No se trata de quien será la autoridad política, como indica mi amigo, sino de cuán importante es para toda la democracia y, el primero de sus derechos, elegir.
Finalmente, como si la ignorancia reinara junto con el miedo en el país, se informa que, por el coronavirus, han sido suspendidas 25 elecciones; búsquenlas, se trata de elecciones municipales, congresuales y primarias y, sobre todo, de sistemas parlamentarios que a diferencia del presidencial, no son a término fijo.
El presidente Medina, el más astuto de nuestros jefes de Estado desde Lilis, ha jugado una carta que Luis, por inexperiencia no jugo a tiempo: Pactar con Leonel.
Los voceros del Gobierno declaran que el presidente no estará un minuto más allá del 16 de agosto y, les creo, pero están arreglando todo para que tampoco esté uno elegido por los dominicanos y, eso será mucho peor que el coronavirus: Por ahora lo más sabio es no hablar de posposiciones, que mayo aún está lejos.